
Echo la vista atrás y me doy cuenta de que ya han pasado tres años desde que cogí una cámara por primera vez con la ilusión de, algún día, poder dedicarme plenamente a la fotografía. Cómo comento en la presentación de mi web, combiné la fotografía con otros trabajos, en la hostelería y también en tienda de ropa. Poco a poco, con mucho esfuerzo, horas , llanto y alegría he llegado a donde estoy ahora. Emprendedora. Nueva empresaria. Autónoma. Aún me dan vértigo estas tres palabras, y eso que hace ya seis meses que decidí emprender «con todas las de la ley».
Pero bueno, hoy no estoy aquí para hablar de cuan duro ha sido el camino, si no de todo lo que he aprendido de él. Y… ¿ Por qué hago este post ? Porqué a menudo me escribís chicas ( de momento sólo chicas ) preguntándome cómo lo hice y me transmitís esas ganas de emprender, de coger una cámara e inmortalizar los momentos bonitos de vuestra familia, y de la gente que tenéis alrededor. Y es que la fotografía… La fotografía enamora. La fotografía te vuelve adicto a los pequeños detalles. La fotografía..esa que en cada click cobra más sentido… ¡ Y otra vez empiezo a enrollarme ! Ahora si… ¡ Vamos allá !
¿ ir o no ir a una academia / instituto ?
A pesar de ganarme las críticas de mis compañeros… No creo que haya que ir sí o sí de cabeza a formarse técnicamente. ¿ Sería lo ideal ? Probablemente. Lo que es seguro es que acudiendo a clase aprenderíamos la parte técnica más rápidamente , pero, ¿ Quién tiene tiempo de ir a clase cuando tienes un trabajo y una familia a la que atender ? Ese fue mi caso, así que yo tuve que aprender » a ostias «, o mas elegantemente dicho a ensayo-error. ¿ Queréis saber lo que me pasó en mi primera sesión de fotos ? Que TODAS, y repito, TODAS las fotos , salieron borrosas. La cosa no quedó ahí, para «mejorarlas» , aumenté la nitidez, al máximo, llenando de puntitos la imagen borrosa, y, para contrarrestar los puntitos, apliqué el maravilloso » reducir ruido «, en fin… Si no entendéis de fotografía seguramente todo esto os suene a chino. Si me está leyendo alguna o algún compañero, estoy segura que debe estar partiéndose la caja. En fin, para los que no entendéis el resumen fue que las fotos en su totalidad fueron un puñetero desastre. ESO SI!! Nunca más me volvió a pasar. Me bastó una sola sesión de fotos para aprender a manejar mi cámara y objetivo.
Si decides no ir a clases y aprender por tu cuenta, recomiendo encarecidamente los cursos de Socialarte , que los tenéis en Youtube de manea gratuita y que os ayudará a conocer mejor vuestra cámara y las tecnicidades necesarias para usarla correctamente. Por supuesto otra cosa que recomiendo es asistir a Workshops de los fotografos que más te gusten. Yo he asistido a fotografía erótica de Jose Sanabria o a fotografía de exteriores de ElephantStudios . No hay nada mejor que caminar de la mano de buenos profesionales para convertirte en uno tú también.
A ser fotografo aprendes haciendo fotos
Literal. Cuando ya te sabes todas las normas y trucos, y leyes, te das cuenta que tu estilo fotográfico implica saltarse cada una de las normas «impuestas». ¿ Y qué ? No pasa nada. Cada persona tiene su propio estilo, que se va definiendo a medida que se hacen más y más fotos. No temas estar haciendo algo bien, o algo mal. Déjate aconsejar y aplica, pero, se fiel a tu estilo, aunque eso signifique saltarse las normas fotográficas.
El fOTOGRAFO NO DEBE ADAPTARSE A LOS GUSTOS DEL CLIENTE
En este caso, el cliente NO tiene porqué tener la razón. ¿ A qué me refiero ? A que habemos miles de fotógrafos con miles de estilos diferentes. Hay fotógrafos que les encanta el contraste, otros que editan en tonos verdes, amarillos, anaranjados. TODO está bien PERO, si eres fotógrafo o piensas serlo acepta este consejo: no digas que si, a un cliente que te pida que hagas las fotografías con el estilo de otro fotógrafo. A menudo estas peticiones suelen ser porqué les gusta el estilo de fotógrafos con un estilo de edición o trabajo muy concreto y que por ende, encarecen el precio de sus servicios y buscan ese mismo servicio de manera más económica. Así que en este caso, si el cliente busca por ejemplo un fotógrafo estilo fine art, no debería contratar a un fotógrafo que a priori no haga ese estilo fotográfico. Básicamente porque las probabilidades de no cumplir la expectativa del cliente es muy alta, y el cliente no va a entender que simple y llanamente lo has hecho como mejor has sabido.
ESPECIALIDADES
Generalmente cuando empezamos en la fotografía hacemos de todo: retrato femenino, retrato masculino, pinitos en moda, familia, parejas, producto si se tercia. Queremos hacer fotos, fotos y fotos. A lo que sea, porque en los inicios todo nos llama la atención. Pero más pronto que tarde tendremos que tomar una decisión. ¿ Bodas? ¿ Familias ? ¿ Producto ? ¿ Marketing ? ¿ Que te llama y te ves haciendo toda la vida ? Es importante que tomes la decisión, ya que depende de esa decisión emprenderás tu camino y comprarás tu futuro atrezzo, material y cursos de especialidad. Recuerda: quién mucho abarca poco aprieta.
hablemos de precios
¿ Cuánto debería cobrar un fotógrafo que empieza ? Pues no te voy a decir lo que te dirían muchos. Hay auténticas «guerras» sobre el intrusismo laboral. Pero también he de decir que hablando con muchos compañeros del sector, son muy pocos los que han empezado cobrando ya sus 150 o 200 euros por sesión, sin haberse dado a conocer, ni saber si su negocio iba a ser rentable. Desde mi humilde punto de vista, pienso que vivimos en un país que ayuda muy poco al autónomo y que lanzarse a la piscina sin tener unas garantías es una locura. ¿ Cómo lo hice yo ? Empezando a trabajar gratis. Infinitas sesiones gratuitas. Lo primero que cobré por una sesión de fotos, fueron 30 euros. ( Matarme, compañeros ). Estuve cobrando las sesiones a 30 euros durante varios meses. Luego, las subí a 50 euros , después, a 80 euros .
Actualmente mi sesión completa más básica está a ciento cincuenta euros. Mis precios han ido en aumento siempre en relación a la calidad de mis servicios : más experiencia, mejor material, mejor atrezzo, lugar de trabajo, y sobre todo y más importante : ser autónoma y pagar impuestos. Así que si me preguntas, y decides que trabajarás de gratis un año completo, me parecerá bien. Si decides que para empezar quieres cobrar barato, también me parecerá bien siempre que te propongas en un plazo X de tiempo subir tus tarifas y mejorar tu servicio.
A MAS BARATO, MAS EXIGENTE
En referencia al punto anterior, he de puntualizar que de si algo me he dado cuenta a lo largo de los años, es que cobrar barato te proporcionará mucho más trabajo, pero, paradójicamente, a cuanto menos dinero suele pagar un cliente más cosas pide y quiere. Así que, novatos y novatas que me estéis leyendo por aquí, ¿ Qué es mejor ? ¿ Cinco clientes a 50 euros , o dos a 150 ? No hace falta decir nada más.